sábado, 15 de noviembre de 2008

Tema de debate

El tema de debate que propone nuestro grupo tras haber examinado el programa, será el séptimo, que trata sobre el elemento gráfico, los tipos de imágenes y de animaciones existentes, el tratamiento digital de la imagen y los usos y finalidades de los recursos visuales, entre otros aspectos que nos parecen estar muy relacionados con nuestra carreara y esta asignatura en particular.

Mundo alternativo (por una de las pocas periodistas de calidad de la Gran Manzana, Mary Wilken)


Me encontraba yo contemplando una réplica alternativa de la escultura de Rodin, "El pensador", por un joven artista del Bronx, que se dedica a esta clase de imitaciones para conseguir sacar a su familia de la pobreza -y esto lo hacía por un encargo que he recibido de escribir un artículo sobre él-, cuando caí en la cuenta del gran triunfo que las alternativas a la realidad está teniendo actualmente.
No sé qué se entiende hoy en día por arte -tanta gente que no tiene ni idea del tema ha opinado, que han acabado por desvirtuar el concepto en su totalidad-, pero lo que sí está claro es que el intento de evasión de lo establecido, de las obras ya vistas, digamos, del sistema en sí, parece la idea más atractiva para escapar de una rutina amenazante -culturalmente hablando-, que amenaza con volvernos clones no-librepensadores.

Y si no que se lo digan a los compañeros de clase del joven sobre el que versa mi artículo -que estudia actualmente en Santiago de Compostela-, entre los cuales las tendencias alternativas han obtenido un gran éxito: se deciden a tratar temas para sus trabajos, que constituyen cosas nunca hechas anteriormente -en su mayoría- : la clasificación de la programación radiofónica por temas, en lugar del orden habitual por horas o emisoras, la difusión de materias quizá ya conocidas: fotografía, música, cómics, pero desde un punto de vista diferente y que resulte más atractivo, páginas sobre grupos musicales que en algunos casos crean sus propios instrumentos, páginas antisistema en las que se ofrecen parodias de la cultura kitsch a la que nos han acostumbrado, etc.

¿Cuál ha sido mi conclusión?
Lo alternativo triunfa. La sociedad comienza a pararse a pensar -como bien quiso representar Rodin con su escultura, y no sé si su imitador-, que quizá algo vaya mal en esta megasociedad carnívora y cada vez más deshumanizada.
Ante la creciente manipulación de información, y la oferta de engaños y contenidos vacuos en nuestros informativos, los jóvenes deciden no conformarse con la oferta existente; quieren movilizarse y buscar alternativas culturales, sociales, políticas -y cómo no-, en la elección de las informaciones que a ellos llegan.

Creo que si Rodin levantase la cabeza, seguramente se contentaría con el incremento de pensadores, que pétreos y estáticos, contemplan a su alrededor para criticar lo que les ha sido dado, y lo que es mejor, ofrecer alternativas para cambiarlo.



(Borrador para un artículo de Mery Wilken, disciplinada, ordenada y culta periodista, en ocasiones demasiado "sabelotodo" y arrogante debido a sus repentinos delirios de grandeza cuando no toma la medicación que su psicoanalista húngaro le ha recomendado)

miércoles, 12 de noviembre de 2008

Reniego de lo que la sociedad me impone. Por la jovencita Tracy:



El otro día, en el instituto (ese lugar lleno de adolescentes bastante infantiles que no comprenden mi gusto por el mundo adulto), un profesor nos preguntó que tema escogeríamos para una página web en el caso de que tuviéramos oportunidad de diseñar una. Por mi parte no me gusta demasiado internet, mis compañeros de clase se pasan el día metidos en ese mundo virtual hablando entre ellos a través de programas que, francamente, no son más que formas diversas de destrozar sus materias grises, ya de por si atrofiadas.


A pesar de todo, la curiosidad me pudo y comencé a cavilar cual sería la mejor opción para atraer a un público interesante y cultivado. Todavía sin haber aclarado por completo mis dudas, decidí pasarme por la casa de mi querido y maduro Issac. Él es un hombre muy inteligente y culto que se mueve en la sociedad prestigiosa e interesante de los barrios altos de Manhattan. Por supuesto algunos no aprecian la capacidad de mi adorado Issac, como ocurre con su ex-mujer Jill (de la cual preferiré hablar en otro momento), pero la mayoría saben que es un sabio y son los menos los que intentan cambiar esa idea.


En este punto, cuando me encontraba descansando en su hogar, Issac me ayudó a decidir el tema perfecto. Me explicó, de esa forma que sólo él puede que, si yo soy la viva imagen de una adolescente que rehúye el serlo, ¿qué mejor que una página donde le enseñemos a todos los demás como poder situarse por encima de esta sociedad materialista e infantil que no aprecia la importancia de una buena conversación sobre cultura fuera de lo comercial?


Así que eso es lo que vamos a hacer yo y, como no puede ser de otra manera, el resto de mis compañeros de reparto. Les mostraremos a los demás como renegar de una sociedad que se impone sin piedad. Les propondremos películas, libros, música, o lo que se nos ocurra (aún debemos matizar un poco este punto) totalmente alternativos. Procuraremos lograr el objetivo marcado convenciéndoles de que tenemos razón. Deseamos conseguirlo.


Se despide desde la casa de su amado una joven enamorada. Tracy.

Otras ideas (peores que la nuestra, seguramente) por Jill.


Aficionada como soy a contar la vida privada de mi ex marido Isaac, al que abandoné por otra mujer a causa de su egoísmo e inutilidad para los aspectos prácticos de la existencia, voy a dejar al descubierto las otras ideas que tuvieron para crear la página web del contenido de diseño gráfico.
Dejando de lado todo tipo de perversiones, antecedentes psiquiátricos y tragedias personales, hablaré de algunas de las ideas que han sido expuestas en el aula 6.

La música, vano alimento para el espíritu de los endebles, se convierte en tema central de muchos de ellos. El cine también predomina (¿no estaban estos chicos estudiando Comunicación Audiovisual?), y el teatro no se queda atrás. Pues sí, les ha dado por ese tipo de cultura de masas, o quizá debería escribir cultura entre interrogaciones. Sin embargo, Marita necesita explicaciones claras y concisas sobre todo contenido de las páginas, así que ideas ambiciosas con generalidad de apartados se (y nos) hemos quedado en proyectos mucho más concretos. ¿Mejores o peores? Eso lo veremos al final.

Como la publicidad abarca un gran espacio dentro de la comunicación, el grupo de Erasmus ha decidido hacer una página corporativa sobre un producto concreto.
¡Oh, un producto más para sentirnos dentro de la sociedad! ¿Qué nos esperará la década de los 80? No quiero ni pensarlo.



Jill, más allá de los convencionalismos sociales (o sencillamente borde).

A favor y en contra del diseño, por Isaac Davis.


Cavilando y pensando en mis, ya, numerosos problemas, se me planteó uno nuevo cuando acudía a las aulas de la universidad de Santiago de Compostela.
Tras abrir la puerta trasera en medio de un infernal ruido, pensaba yo como, tras numerosas generaciones de estudiantes que habían pasado por allí, aún no estaba solucionado dicho problema.
Y fue entonces cuando, injuriando en contra del diseñador de tal mueble, me alegré al observar como el tema de debate en aquel aula seis versaba sobre el problema del diseño.

Interesantes las opiniones de aquellos estudiantes a favor o en contra, tímidas respuestas de los post adolescentes portugueses que, extranjeros como yo ( neoyorquino a mucha honra) alzamos la voz tímidamente ante el resto de personas allí presentes... Para hablar, nada más y nada menos, que de aquel fatídico día, cuando en mi bote de salsa, de una conocida marca, no entraba una triste cucharilla, aumentando mi frustración y, he de decirlo, mis ganas de probar aquel sabroso manjar.

Pero un esbozo de sonrisa apareció en mi cara cuando vi que no era el único que tenía problemas con los diseños de numerosos productos cotidianos, (aunque probablemente fuese la única persona que visitaría hasta nueve veces a su nuevo psicoanalista húngaro para tratar de solucionarlos).
La carpeta de dicha universidad (con la que yo ya había tenido problemas al casi perder, por la ausencia de solapas, mis valiosísimos apuntes y mis futuros guiones de cine); las molestas etiquetas de la ropa; o la propia densidad de la revista Cinemanía, de la que yo he sido portada varias veces, había llamado la atención de aquellos jóvenes adultos.

Aunque no todo serían malas noticias, los ordenadores Mac, los famosos antiquemallemas de Starbucks (que varias veces me han salvado de una quemadura segura), o las bolsas de plástico para que los paraguas no dejen todo pingando en las tiendas de ropa, se llevaron la aprobación de mis compañeros compostelanos, y he de decir, la mía propia.

Pienso que es suficiente desvarío por hoy querido diario-multimedia. Es hora de que mis compañeros de reparto ocupen espacio en este nuevo blog.
Expresad vuestras ideas!!!


Firmado: Isaac Davis, el mayor seductor de Manhattan